The Ghost on the shelf
The posessor
En el precámbrico de mi existencia,
vivía inocente en el estante de aquella preciosa juguetería de Boston.
Más tarde fui feliz en el anhelo de aquel precioso ser.
Tiempo después, cuando las esperanzas empezaron a ser vanas,
pasaba las horas en un anaquel en un cuarto oscuro.
La noche en la que la sombra llegó, soñaba con otra vida.
La noche en la que el fantasma de melancolía me visitó,
comencé otra vida.
Una vida que no era la mía,
una vida impostada.
. La vida de un fantasma, el fantasma del anaquel.
Me convertí en su álter ego.
La ingenuidad de mi pequeño corazón de trapo murió en aquel instante.
Aquella leve esperanza que mi alma de tela albergaba se diluyó para siempre.
Ahora soy el Ortunyo...quizás.
O quizás no sea nada más que el compendio de recuerdos
del fantasma en el estante...
Autoría: Ortunyo Benjumea Mcnulty
(texto registrado)