Este escrito es una elegía a nuestro querido amigo Giorgi, un gato que decidió compartir su vida con nosotros. Una amistad que fue más allá de una relación humano-animal que fue y será siempre una comunión de espíritus afines.
Descansa en paz amigo querido.
Nervio Vago
Noto la voz ronca...
¿Será la rigidez de la tarde en este otoño que me arropa?
Como, y la comida se entretiene en mi estómago,
no me quiere alimentar.
¿Será este otoño que lo envuelve todo de una vagancia extravagante?
Hay momentos en el que no escucho mi corazón... es un palpitar tan leve como una canción de cuna.
¿Será la calma que antecede a la caída de las hojas de este almendro, en este otoño que mece tu eterno reposo, y aquieta mi ganas, y mi yo todo?.
Ando a la espera de una nueva lluvia otoñal que certifique un nuevo aliento, en una nueva vida en otros mundos quizás.
¿Será este otoño hambriento que se alimenta de mi nervio Vago buscando esa nueva existencia?
Llevo un tiempo que de tanto halítar (1) podría limpiar todas las gafas de este planeta... pero mi nervio Vago se ha vuelto ahora más indolente si cabe
¿Será que este otoño es un terminal de estación?...
Hay mensajes que solo el otoño entiende... hay respuestas que solo el otoño conoce, y ahora te las susurra en tu alma...
Mensajes que mi nervio Vago recoge y los hace retumbar en este vacío tan enorme que dejas.
¿Será que este otoño de mi vida se ha transmutado en tu invierno?
Cuando cae la tarde te busco en cualquier recoveco de este jardín gris de otoño...
Cuando los suspiros me mantienen en pie, quisiera dejar de respirar, tan solo atender al silencio para poder escucharte y dejar que mi nervio Vago vuelva a revivir como antes.
Sería fantástico poder vivir juntos de nuevo todas esas aventuras que tanto te gustaban...saludarnos de nuevo con nuestro "cocos"(2)…poder dejar que mordieras de nuevo mi mano mi brazo y todo lo que quisieras en nuestros juegos de tu infancia.
Ya no importaría nada con tal de estar de nuevo juntos e invencibles... mi querido Giorgi.
Mi nervio Vago ya no quiere más de esto mi querido amigo.
¿Será que este otoño...?
¿Será que se convirtió este otoño en mi invierno?
Tan sólo tú, mi querido amigo tienes la respuesta...
Espéranos en tu nuevo mundo. Un mundo en el que te estarán esperando todos los seres que amé y me amaron...
Un mundo en el que espero se hallen todas las puertas que desees, para abrirlas y saciar tu indómita curiosidad, mi querido Giorgi.
Un mundo hecho a tu medida en el que nos esperaras, porque tú mundo será nuestro mundo.
Tan pronto te fuiste, tan desangelados nos dejas, tanto de nuestro corazón te llevas, que nuestro nervio Vago habrá de hacer horas extras para poder mantenernos en pie ante tu última morada... mi dulce, nuestro dulce y amado Giorgi.
Notas:
(1) Halítar: acción de echar aliento. Para las personas que padecemos síndrome vaso vagal (desmayos, o sincopes) hacer este tipo de soplido cálido, como si fuésemos a limpiar los lentes de unas gafas, nos ayuda a reequilibrar nuestro nervio vago, y evitar el desmayo.
(2) "Cocos": Giorgi y yo nos saludábamos haciendo entrechocar suavemente nuestras cabezas cada vez que yo le decía "Giorgi, ¿hacemos cocos?" una forma de comunicación muy intima solo entre nosotros.