¡¡Oh my God!!
Soy del Norte.
Hambriento de Sur
Frío en mi cabello.
En mi nariz esculpida.
Dios mío ¿Qué me he hecho?
Debería ser más cuidadoso,
con estas cosas es mejor no jugar.
Dios mío ¿Qué tragedia, de conciencia?
Ahora me temo
habré de navegar
en barcos de cristal.
en donde la sal del agua del mar
se contenga en las bodegas.
Dios mío ¿Qué trayecto he de tomar?.
Despoje el hogar de ternura.
No pare de mover los muebles de aquí para allá,
hasta dejar irreconocible este lar.
Deje los hierbajos crecer... la humedad manchar mis manos...
Escribí en la pared que da al oeste,
la perfecta elegía a la traición...
Dios mío ¿Qué nos hicimos?
Vuelvo a Norte,
olvidaré este Sur...
Volveré al frío.
Congelare el rencor.
Dios mío ¿Quién ha de hacerme la verdadera pregunta?
Autoría: Ortunyo Benjumea Mcnulty
(texto registrado)